En estos tiempos hasta el mismo día no sabes si habrá mercadillo o no, los índices de contagio marcan el ritmo. Hoy si había, el próximo domingo ojalá, será buena señal. El cierre perimetral hace que el mercadillo de Chiclana esté a medio gas, y si además vas a las primeras horas cuando aún están montando sus tenderetes los vendedores, las distancias entre personas se respetan con creces, de eso se trata.
Bueno a lo que vamos, algunas cosas en las alforjas, no muchas, de entre las que destaco este abanico y el libro de rotulación con pluma. Esta zona es propicia para que aparezcan abanicos con temas de sevillanas o flamenco y la verdad es que no les presto mucha atención, pero este que me traje, tiene unas ilustraciones más infantiles que me parecían interesantes, tiene algún desperfecto pero no desmerece. Mi profesión y los inicios en el dibujo en la escuela de formación profesional, son el motivo por el que me agencié este antiguo libro, "La Rotulación a la Pluma. Las Ediciones de Arte, Barcelona, 1960". Cuantos tachones sobre el papel, menos mal que solo fue en los inicios si no hoy estaría hablando de otra profesión distinta.
