En estos días se han cumplido 40 años desde que comencé a trabajar como delineante, seguramente durante estos años alguna vez se me han pasado por la cabeza dudas o arrepentimiento por la profesión elegida, pero después de toda una vida trabajando en lo mismo y en vista del tiempo que me queda, laboralmente hablando, claro, no puedo sino sentirme orgulloso de ello.
El motivo de esta reflexión es que ayer domingo en el mercadillo de Chiclana de la Frontera encontré el libro, mi primer libro, con el que aprendí el oficio de delineante, Dibujo Técnico de Bachmann Forberg, aquel ejemplar lo heredó mi hermano que eligió el mismo camino profesional. Corría el año 1975 cuando comencé mis estudios en la Institución "Virgen del Carmen" de Puerto Real, Don José Chanivet y Don Antonio Hernández fueron mis primeros maestros los que me marcaron, con ellos comencé con las plumillas para rotular, el tiralíneas..., que tiempos. En 1979 después de pasar varias pruebas comencé a trabajar en la Sala de Delineación, hoy en día no queda nadie de los que me recibieron como compañero, he visto marchar a todos, soy el más viejo del lugar.
A continuación unas imágenes de las primeras páginas del libro, las más ilusionantes, y las cartas recibidas de la Escuela y de la Empresa.
