Si tuviera que quedarme con alguna pieza de todas las vistas en el rastro de hoy, sin duda hubiese sido esta maqueta realizada a mano y pintada cada pieza una a una representando una batalla entre las tropas británicas y guerreros zulúes (1879). Gustosamente hubiese pagado lo que me pedía el vendedor, o mejor habría entrado en un tira y afloja, si no fuera por el espacio, el maldito espacio. Grandiosa maqueta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar en mi blog