Mercadillo de Campano, sábado 4 de julio

Ya sopla el levante, bendito levante que limpia el ambiente, que en estos tiempos es más necesario aún, y que nos permite el privilegio de vivir en un paraíso sin masificar, bendito levante.
Hoy como sábado que es toca mercadillo a primera hora, mercadillo de Campano, quisiera tener planes para cambiar, pero ahora es difícil, mejor no arriesgar. Alrededor de 50 puestos de los que una decena aportan el toque de distinción con sus objetos antiguos, el resto aportan lo que tienen sin desmerecer, a veces es ahí donde pillas lo interesante.
Este muñeco ya lo tenía mi mujer cuando la conocí, hace casi 40 años, las sobrinas jugaron con él y quedó desnudo, cuando nos vino la idea de adecentarlos se le confeccionó la ropa. Hoy le he encontrado estas simpáticas gafas que le vienen bien pues se le ha diagnosticado una miopía. El pupitre le queda pequeño, no se aún que haré con él, mientras lo inmortalizo en el blog, me parece encantador, igualmente llega de Campano.
Otro sábado llegará la ocasión en la que pille algún tesoro, a mi modo de entender, para cuando eso ocurra deberé encontrarme allí.