De vuelta del rastro de Jerez el pasado domingo circulando por la zona residencial de clase alta de la ciudad, observo esta Vespa de juguete "aparcada" junto a unos contenedores, han cambiado los tiempos una barbaridad, a esa motocicleta en mis tiempos le quedaba aún muchísimas horas de juego. Quiero pensar que tras de mi llegó alguien que la recogió junto a las piezas sueltas y le realizará la reparaciones necesarias para que otro pequeño, seguramente en otra zona de la ciudad, la disfrute unos años más.
En mi infancia cantábamos una canción que decía algo así, "Hoy estoy muy contento, porque mi madre me ha hecho, unos pantalones nuevos, de los viejos de mi padre, …".
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