Ese es el titular de hoy, por fin visita al rastro con temperatura suave, aunque también podría haberse titulado 'regreso a la rosaleda' o 'encuentro con algún amigo'. El rastro de Jerez ha vuelto a La Rosaleda en el interior del Parque González Hontoria, al oírlo se podría pensar que estábamos de enhorabuena, para nada, porque si a esto añadimos el peligro de caminar entre restos de casetas y clavos un mes y medio después de acabada la feria me parece vergonzoso, y más aún si se tiene en cuenta que, aparte de ser recinto ferial o rastro dominical, se trata de un parque público donde numerosas familias acceden cada día. No me parece de recibo.
He leído que extrañamente este verano no se va a proceder a suspender el rastro durante el mes agosto, por mi parte dudo que vuelva durante las próximas semanas, y es que aunque el día de hoy no ha estado mal, temperatura agradable y más puestos de los esperados, personalmente voy a descansar de Jerez unas semanas. Por lo demás poco más, salvo un rato agradable con el amigo Diego charlando sobre coleccionismo, él también se pilla ahora unas vacaciones.
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